La luz que sigilosa llega
reclina en el postigo su reflejo
te cubre el sueño
centinela en vilo
de tu viaje inconcluso
travesía insalvable
hacia la muerte
Existe un espacio sideral entre la muerte y nosotras,poesía prolífica que alimenta corazones vacíos y soledades compartidas. Existe un piélago de dudas entre tu piel y mi desencanto
1 comentario:
Hola, María:
Como la vida en un suspiro se lee tu verso; como también en un suspiro decimos adiós... pero tambien hay veces que ni adiós podemos decir, por eso debemos siempre encender la luz escribiendo versos, escuchando música y dando beso y abrazo...,¡somos estrellas de luz, si sabemos vivir para amarnos y amar!
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